| EL ORO AZUL
El capataz te propone trabajar mano a mano con él vigilando la explotación, manteniéndote el salario de dos dólares diarios. Te dice que al seguir estudiando respondes mejor al puesto de vigilante que a otro cualquiera. Aceptas encantada. A medida que pasan los días empiezas a notar actitudes demasiado cariñosas por parte del capataz hacia ti.
Muchos estudios revelan la importante y terrible implicación de esta minería en cuestiones de género. Más del 74% de las mujeres que trabajan en estas minas están sometidas a violencia sexual. |
Comienzan entonces los abusos sexuales y violaciones. Te amenaza con hacer daño a tu familia si cuentas algo de lo ocurrido. El miedo te impide reaccionar. A los dos años te quedas embarazada, en un control médico te informan que eres portadora del VIH. El capataz te deja “libre” y vuelves a trabajar en el lavado. A consecuencia de la exposición al cobalto, tu bebé nace con una patología severa. Te ves obligada a dejar el trabajo para cuidarlo y decides colaborar con tu familia en el cultivo del café. Has conseguido salir de la explotación minera pero las secuelas y consecuencias son incalculables.